Las mamas tuberosas son aquellas que se han desarrollado de manera anómala en cuanto a forma. Es decir, los pechos que las mujeres describen con forma de cono o tubo y que, en la mayoría de los casos, presentan areolas demasiado grandes y dilatadas.
Las mamas suelen ser asimétricas.
Un alto porcentaje de las pacientes que solicitan al cirujano plástico un aumento mamario tienen algún grado de tuberosidad en sus mamas, por lo que es necesario valorar cada caso para definir la mejor técnica a aplicar.
General
2 horas
Requiere hospitalización
A definir por el especialista
Consiste en la remodelación de la glándula mediante diferentes técnicas junto con la implantación de una prótesis que aporte volumen en las zonas que se necesita. Generalmente, hay que corregir también el tamaño de la areola para disminuirla.
Las mamas tuberosas requieren una amplia experiencia para lograr resultados óptimos ya que se necesita colocar los implantes y distribuir la glándula ya existente de manera uniforme para lograr una integración de implante y glándula mamaria con un buen resultado.
El resultado que se persigue es lograr un pecho proporcionado en todas sus partes, con una mejoría armónica en sus volúmenes y proporciones.
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